Alquilantes Los agentes alquilantes son fármacos administrados habitualmente en quimioterapia.
Disnea. La disnea consiste en experimentar dificultades para respirar o sensación de falta de aire.
Fibroadenoma. Tumor benigno más común en la mama femenina, compuesto por tejido epitelial y fibroso.
Hematoquecia. La hematoquecia hace referencia al paso de sangre brillante por el recto.
Hemoptisis. Sangrado anómalo con la tos. En oncología, se suele asociar al cáncer de pulmón.
Linfoma. El linfoma es un cáncer que se desarrolla en las células blancas del sistema linfático.
Neoadyuvante. Un tratamiento neoadyuvante es aquel que se realiza antes de la cirugía.
Neumonectomía. La neumonectomía es la extirpación quirúrgia de todo un pulmón.
Poliquimioterapia Combinación de diferentes fármacos antineoplásicos.
Proctoscopia Examen interno de la parte inferior del intestino grueso (colon).
Rectorragia Tipo de hemorragia que consiste en la pérdida de sangre a través del ano.
Remisión La remisión es la disminución o desaparición de los signos y síntomas del cáncer.
Sarcoma. El sarcoma es un tipo de cáncer que se origina en tejidos, como los huesos o los músculos.
Síndrome tóxico Cuadro de pérdida de apetito, pérdida progresiva de peso y debilidad.
Terapia focal Técnicas mínimamente invasivas que destruyen tumores pequeños.
TNM Sistema de estadificación de las fases de evolución de un cáncer.
Tumor benigno Tipo de neoplasia que carece de malignidad.
Tumor. Un tumor es una masa de células transformadas con crecimiento y multiplicación anormales.
Se trata de una estructura, de forma y tamaño variable, de un vaso linfático o por un acúmulo de tejido linfoide. Se pueden distinguir los ganglios linfáticos y los ganglios nerviosos.
Un ganglio nervioso es una aglomeración de somas en el sistema nervioso autónomo, el cuál conecta el sistema nervioso central con los órganos sensoriales.
El sistema linfático, formado por vasos y ganglios linfáticos, forma parte del sistema inmunológico. Los ganglios linfáticos actúan como “filtros” para las sustancias nocivas y cuentan con células inmunitarias que ayudan a combatir gérmenes e infecciones. Cuando los ganglios linfáticos no funcionan correctamente pueden inflamarse y producir síntomas como fiebre o dolor de oído.
Cuando un paciente padece cáncer, los ganglios linfáticos cercanos al tumor están trabajando para matar sus células cancerosas. Por ello, cuando el cáncer alcanza los ganglios linfáticos implica un aumento en la estadificación de la enfermedad. En algunos casos, se procede a la extracción quirúrgica de los ganglios afectados.